Monday 4 February 2013

Dejen a Pachito en paz


"Yo quiero que a mi me quieran..."

Se corre el rumor (aunque no sé si solo será eso, un rumor) de que un niño culto y del mejor talante está pensando en lanzar su candidatura por la alcaldía mayor de Bogotá, me refiero nada más ni nada menos que a Pachito Santos, a ese nene consentido que sale con cada fábula en todo coctel que se le encuentre.

Se que se barajan muchas posibilidades para tumbar a toda esa manada de payasos “izquierdosos” del poder, porque hay que recordar que desde que esa chusma libertaria llegó al Palacio de Liévano las cosas han ido de mal en peor, desde que se le da solo prioridad al ser humano y no a la infraestructura, como debe ser el compromiso de todo burgomaestre, la ciudad ha ido cada día de mal en peor.

Y es que la izquierda recalcitrante ha logrado hacer metástasis en el sistema político colombiano como un mal cáncer (como un cáncer de colon me imagino, porque se nos metió por donde menos esperábamos) y se ha apoderado desde hace ya varios años del mandato de los destinos de la ciudad positiva, esa que ahora solo parece impositiva debido al pequeño “dictadorzuelo” que adolecemos.

Es por eso es que me atrevo a decir que estoy totalmente de acuerdo con que mi Pachito se lance al ruedo político y busque recuperar ese espacio perdido por la oligarquía en Bogotá, porque Pachito es lo mejor que le puede pasar a esa ciudad. Recuerda, Pachito te da energía, la meta la pones tu!

Yo no sé por qué hay gente que no lo quiere, que no lo aprecia o simplemente se burla de él, si es una persona sumamente capaz de dirigir los destinos de cualquier guardería o jardín infantil, porque con su corte de infante puede conmover a todos hasta las lágrimas de cualquier cosa, incluso de que hay que electrocutar a los estudiantes revoltosos (y la razón le doy: dejen de joder y pónganse a estudiar carajo) o que no es familia directa de mi presidente del alma Juan Manuel Santos Calderón.

Porque imagínense, cómo no va a ser un lindo adorno en el Palacio de Liévano si ya fue un hermoso florero en el Palacio de Nariño… es el burgomaestre que necesita el pueblo, y sobre todo el títere que necesita Álvaro para mandar en puerco ajeno los destinos de Bogotá, después de que su primo (el de Pachito) lo traicionara y no se dejara mangonear. Pacho, mi Pachito es la opción ganadora: sin talante, sin fuerza de voluntad, solo repitiendo y aplaudiendo lo que hace don Ubérrimo y es un ser que puede hacer una pataleta de todo con solo tirarse al piso y contener la respiración hasta desmayarse.

Es un niño, un infante, un ser inocente que nada tiene que ver con esas falsas acusaciones de que quería montar un bloque paramilitar en Bogotá, se imaginan ustedes queridos lectores a mi “Pachis” haciendo semejantes cosas de gente adulta? Jamás sería capaz de pensar semejante atrocidad, a lo mucho lo que habría hecho es una pandillita para jugar yermis o a las escondidas americanas, al tin tin corre corre u otras cosas de los seres impolutos como él.

Además recuerden que él si ha sufrido los embates del terrorismo y del flagelo del secuestro, no como ese Petro malo que estaba del otro bando secuestrando… porque mientras ustedes y yo estábamos plácidamente descansando en nuestras casas él estaba secuestrado, privado de la libertad que tanto quiere quitar ahora y  estaba también privado de sus juguetes más preciados, de su caballito de madera y de su juego “Operando” (juego del cual sacó la idea de electrocutar estudiantes), estaba separado de los arrullos que él merece y de su mantita de bebé que le acompaña a cada lugar que visita. Por eso digo, es un acto no solo de buen proceder sino de restitución el que se vote por Pachito a esa alcaldía.

Ay mi Pachito, es que yo si quiero que a él me lo dejen en paz, que lo dejen juguetear como todo párvulo lo merece. Además recuerden que él mismo fue quien promovió el Mandato por la Paz con el fin de que el gobierno impulsara el diálogo con las guerrillas como vía para lograr la paz y erradicar el secuestro en el país, aunque ahora lo niegue o solo se ufane de decir que él siempre ha estado en contra de que se le entregue el país a esa manada de guaches de la guerrilla.

Por eso vuelvo y digo, con Pachito si me monto en el trenecito del saber y espero con ansias locas que se lance a la alcaldía, no solo eso, que la conquiste como ha conquistado nuestros corazones con su inocencia plena, con su corte juvenil (de juventudes Hitlerianas) y su hablar tan particular que nos muestra su alta cuna.

Así que invito a todos para que animemos y votemos por Francisco “El niño” para que la ciudad vuelva a estar más positiva que ahora, para que se reparen huecos y se dibujen “golosas” en todas las avenidas para que con Pachito, cogidos de la mano, saltemos de dos en dos, alcemos la pata y digamos adiós. Porque si él no llega a la Alcaldía me pregunto, como el grupo mexicano Maná: En dónde jugarán los niños… pero los niños de bien, nada de chusma.

Porque ya es hora de que erradiquemos a esa chusma comunista de los destinos de los colombianos, Pachito Alcalde!

2 comments:

  1. añoro el día que no necesitemos "politicos", y más aun del talante de los políticos colombianos.

    Propongo organizar un baloto bogotano, en el que a cada rolo se le de un "ficho", y que el ganador sea el ALCALDE DE BACATÁ.

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